Benarés, la ciudad más sagrada de India
Todo el mundo lo dice: viajar a la ciudad de Benarés marca un antes y un después en la vida. La atmósfera que se respira en esta ciudad, unida a la forma de vida de sus habitantes y a toda su importancia espiritual, deja siempre huella en todos los viajeros.
Pero, empecemos por contarte las razones por las que tendrías que realizar una parada en Benarés, también conocida como Vanarsis, durante tu viaje a India.
Una ciudad sagrada
Benarés es una de las siete ciudades sagradas del hinduismo, así como para el jainismo y el budismo, además de ser una de las ciudades habitadas más antiguas del mundo, con más de tres mil años de antigüedad en los que nunca ha dejado de estar poblada, por lo que conserva numerosas tradiciones milenarias.
Tan solo pasear entre sus calles estrechas es ya una increíble experiencia en sí misma: multitud de personas transitando, muchas de ellas sin rumbo, olores diversos que se entremezclan, puestos ambulantes de todo tipo y un sinfín de contrastes que te impresionarán.
Ganges, el río en el que todos los hinduistas quieren bañarse
El río Ganges, con una longitud total de 2.510 kilómetros, de los cuales 6 atraviesan Benarés, se ha convertido en todo un símbolo de la ciudad. Y no es para menos, es un río sagrado para los hindúes, quienes realizan peregrinaciones para conseguir bañarse en sus aguas ya que, de acuerdo con sus creencias, este río tiene propiedades curativas y perdona los pecados pasados. La tradición marca que todo hinduista debe visitar esta ciudad para bañarse en el río Ganges por lo menos una vez en su vida.
Y van un paso más allá. Según los textos sagrados hindúes, si te mueres en Benarés, obtendrás un pase directo al paraíso, evitando las seis reencarnaciones. Es decir, alcanzarás el moksha, eximiendo a tu alma del ciclo del nacimiento, la muerte y la reencarnación vinculado al karma.
Esta tradición origina que, a pesar de que el río Ganges sea uno de los más contaminados del mundo, los hindúes viajen a esta ciudad para bañarse en sus aguas o arrojar las cenizas de sus queridos a este río.
Los ghats que reflejan el estilo de vida de la ciudad
Una de las experiencias más increíbles durante tu viaje a Benarés, será precisamente navegar por el río Ganges. Si puede ser, hazlo durante el amanecer, cuando se aprecia cómo la ciudad despierta y empieza el movimiento entorno al río a través de los ghats.
Los ghats (que significa peldaño) son grandes escalinatas o gradas, situadas a las orillas del río, que lo conectan con la ciudad de Benarés. Hay alrededor de 90 ghats, construidos entre los siglos XIII y XIX, repletos de vida en los que la gente reza, lava ropa, practica yoga o se da un baño.
De entre todos los ghats, hay tres que destacan por su importancia:
- Ghat Dasashwamedh, bastante popular tanto entre los turistas como entre los locales por las ceremonias religiosas que se desarrollan en su interior, en las que el fuego es el principal protagonista. Suele estar lleno de peregrinos y vendedores ambulantes que ofrecen todo tipo de artesanías locales.
- Ghat Scindia, es famoso por estar medio sumergido en el río debido a su elevado peso. Además, se considera que en este templo nació el dios hindú Agni (el dios del fuego).
- Ghat Manikarnika, en el que se realizan cremaciones de difuntos. Sobre balsas de bambú llegan los difuntos a este ghat, donde son lavados con el agua del río Ganges, y después se incineran en una pira funeraria para acabar esparciendo sus cenizas por el río.
El templo Viswanath, un must que no puede faltar
A no ser que seas hinduista, solo vas a poder observar al templo Viswanath. desde fuera, puesto que su acceso está limitado a los hindúes, pero bien merece la pena contemplar sus cúpulas recubiertas por unos 800 kilos de oro y el ambiente que le rodea, con una multitud de devotos que lo visitan día tras día.
La universidad hindú más prestigiosa
No hay que pasar por alto que Benarés es también un enclave famoso para la cultura hinduista. La Universidad Hindú de Benarés, fundada a principios del siglo XX, es una de las más prestigiosas y en ella han estudiado algunas de las personalidades más relevantes del país. De hecho, Mahatma Gandhi pronunció uno de sus más famosos discursos durante su inauguración, reclamando la independencia para India, entonces una colonia británica. Con un campus de cinco kilómetros, es un remanso de paz dentro de la caótica ciudad.
Palacios, callejuelas y la mayor religiosidad
Todo esto hace que no haya mejor lugar en la India para comprender su esencia que Benarés. En esta ciudad se respira una mayor religiosidad y se aprecian mejor las diferencias entre las castas. Con un río rodeado de templos, palacios y mansiones, y un estilo de vida arraigado en las tradiciones más antiguas, Benarés provoca un choque cultural a los visitantes occidentales, que asisten sobrecogidos a sus ceremonias milenarias.
Por todo esto, si quieres viajar a India, es necesario que tu itinerario incluya una visita a esta ciudad sagrada que te hará mirar la vida con otros ojos.